NO SÓLO BARRY WHITE SABE DE AMOR

El amor… Vaya que si tiene autores. Son tantos los autores que hablan acerca del amor, que si los empiezo a nombrar, no terminaría este post. Pienso que no hay que ser letrado en el asunto del corazón para hablar de ello, sólo hace falta sentir y vivir todo lo que significa amar, es decir, experimentar cada sentimiento que conlleva a ese señor como la alegría, el dolor, la decepción, la comprensión… TODO!

Todos los seres humanos estamos en la capacidad de reconocer esas típicas de enamoramiento. Sólo tenemos que aprender a diferenciar entre las señales reales o un simple revolcón de una noche.

Me causa mucha gracia como a estas alturas de la vida, existen personas que aún creen en la “palabra” del diablo. Caso típico es el de la “victima” que se enredó con su “victimario” porque éste le prometió el cielo y las estrellas. POR DIOS!

Pero bueno, de eso no se trata este post, sino del hecho de que todos los que sentimos el amor, bien sea el amor a nuestra pareja, nuestra familia, por las artes y música, por el sexo, sea el amor que sea; todos absolutamente todos podemos tomar las decisiones correctas. No es que no crea en los terapeutas, pero como puede una persona extraña ayudarte en TUS problemas del amor. Eso lo entiendo de un amigo o amiga, pero de un extraño lo encuentro inconcebible.

Aún habiendo dicho lo anterior, permítanme recomendarles algo que he aprendido a punta de golpes: Las oportunidades son únicas, el tren de los buenos momentos sólo pasa una sola vez, y si tú no lo tomas, otro lo hará por ti, disfrutará por ti y sabrá muy dentro de él, que él si tomó la decisión correcta.

Nunca temas a tomar la decisión correcta. Sólo debes creer en ti, creer en tus acciones y palabras, creer en que si eres capaz de hacerlo y con eso bastará para saber que eres especial. No necesitas de nadie más que tú. Si despejas un poco la mente del bendito “qué dirán” estoy seguro de que no hará falta nada ni nadie que te ayude a lograr tu cometido. Y es que no sólo Barry White sabe de amor… Tu también sabes de amor. Vé y demuéstralo sin miedo alguno!